Los pequeños agricultores y los trabajadores se cuentan entre los más marginados en el sistema comercial mundial. En Fairtrade, son la esencia de todo lo que hacemos. La característica que distingue a Fairtrade de otros sistemas de certificación es que los productores participan en igualdad de condiciones en la gestión y la toma de decisiones en Fairtrade.
Para los agricultores y trabajadores, Fairtrade equivale a:
• precios que procuran cubrir los costos medios de producir los cultivos de manera sostenible, lo que representa una vital red de seguridad para cuando caen los precios de mercado;
• la Prima Fairtrade, una suma extra de dinero que se paga adicionalmente al precio de venta para invertir en proyectos empresariales o comunitarios a su elección; - condiciones de trabajo decentes y prohibición de la discriminación, el trabajo forzoso y el trabajo infantil;
• mayor capacidad de planificación para el futuro, con mayor seguridad y relaciones más sólidas con los compradores.